Un estudio reciente llevado a cabo por un equipo de científicos ha revelado la presencia de bacterias potencialmente peligrosas en los aviones comerciales. El estudio examinó muestras de diferentes áreas de varias aerolíneas, revelando la existencia de una gran diversidad de bacterias en los aviones, incluyendo algunas cepas conocidas por su resistencia a los antibióticos.
Microbiólogos e ingenieros de la Universidad de Auburn en Alabama (Estados Unidos) recolectaron muestras de superficies como los asientos, los apoyabrazos, las bandejas plegables, los compartimentos superiores y los baños de varios aviones comerciales. Al analizar estas muestras, encontraron una abundancia de bacterias, incluidas cepas de Staphylococcus aureus resistente a la meticilina (MRSA) y Escherichia coli resistente a múltiples fármacos (MDR-EC). Estos resultados son motivo de preocupación, ya que los aviones son espacios cerrados donde los pasajeros pasan largos periodos de tiempo, lo que aumenta el riesgo de exposición y propagación de bacterias. Además, los aviones son ambientes propicios para el crecimiento bacteriano debido a la alta humedad relativa y las superficies de contacto frecuente.
Así como el ensayo realizado por Travelmath, que concluyó que «Los aeropuertos y los aviones están más sucios que su hogar» emitiendo los siguientes resultados:
En concordancia con el estudio realizado por insurancequotes.com, añadiendo además que el lugar más sucio de todo el aeropuerto sería la pantalla táctil del check-in automático, en la que los viajeros imprimen su tarjeta de embarque, para ahorrarse hacer la cola en el check-in. El estudio encontró pantallas con hasta 1 millón de CFU. Lo más preocupante no es el número encontrado, sino algunos de los tipos de bacterias halladas.
Si bien las aerolíneas implementan protocolos de limpieza y desinfección rigurosos, estos resultados indican que podrían ser necesarias medidas adicionales para garantizar la seguridad de los pasajeros. Los expertos demostraron que se deben fortalecer las prácticas de higiene y limpieza en los aviones, centrándose especialmente en las áreas de mayor contacto, como los asientos y los baños. Según el microbiólogo Jason Tetro asegura que una de las mejores maneras para mantener la higiene adecuada en aeropuertos y aviones es usar antimicrobianos integrados en la formulación o recubrimiento de los materiales/superficies, ayudando así a reducir la exposición a dichas bacterias. Todo esto sin perjuicio de seguir aplicando los protocolos de limpieza existentes.
Ambos estudios revelan una preocupante presencia de bacterias, incluidas cepas resistentes a los antibióticos en los aviones comerciales. Haciendo latente la necesidad de una mayor higiene y medidas de limpieza rigurosas para garantizar la seguridad de los pasajeros en el entorno aéreo.
Polygiene Biomaster aporta capacidades antimicrobianas a los materiales en los que se incorpora previniendo el crecimiento de las bacterias en las superficies y complementa los protocolos de desinfección, permaneciendo activo 24/7 durante toda la vida útil del producto.